El Ejecutivo Eficaz (Drucker) |
Para Drucker el ejecutivo eficaz es aquel trabajador del conocimiento cuyo
trabajo afecta a la capacidad de una empresa para obtener resultados
desarrollando una serie de actividades correctas. La eficacia* por tanto
depende de la capacidad para hacer bien las cosas correctas.
Observación. Personalmente y desde mi
perspectiva prefiero trabajar sobre el concepto de eficiencia
pues este observa la consecución de los objetivos con el menor consumo de
recursos (los cuales son finitos tanto en el desarrollo personal como en
nuestro trabajo en cualquier entidad). El desarrollo del artículo hace que en
muchas ocasiones ambos conceptos se hagan intercambiables.
La consecución de esta eficacia se basa en cinco “talentos” esenciales a
desarrollar: la administración del tiempo, discernir lo más adecuado para la
empresa, distinguir donde y como aplicar nuestras fuerzas para los mejores
resultados, reconocer prioridades y la combinación final de los cuatro
anteriores.
La buena gestión del tiempo
(1)
La determinación clara del conjunto de actividades que se realizan es
clave para determinar posteriormente cuales de ellas se deben delegar, cuales
reducir o abandonar y cuales reforzar siempre teniendo en cuenta nuestras
prioridades y la cualificación de nuestros colaboradores (existen actuaciones
que pueden ser desempeñadas mejor por las personas que nos rodean)*.
Nota*. El proceso es el mismo en el análisis inicial de los procesos que conforman una organización y que los consultores efectuamos en en los trabajos iniciales de implantación de un Sistema de Gestión.
Observación*. Por otro lado su optimización es considerada una de las principales leyes de la simplicidad por parte de Maeda.
Observación*. Por otro lado su optimización es considerada una de las principales leyes de la simplicidad por parte de Maeda.
También debemos trabajar en la “consolidación del tiempo” como
consecuencia de que el trabajo intelectual requiere una mayor dedicación en
tiempo de modo que se gane en efectividad en comparación con varios espacios
limitados de tiempo. El “sumergirnos” en una tarea conlleva la creación de
valor, el descubrimiento de soluciones, los
mejores análisis y la adopción de mejores decisiones.
Centrarnos en lo que se
puede contribuir (2)
El centro de atención de nuestro trabajo debe situarse en los detalles
diarios de modo que nos centremos en las necesidades y resultados buscados* por
la empresa en cada momento. Se debe tener una visión holística de la
organización, su entorno
así como de nuestro desarrollo profesional en la totalidad del conjunto.
Nota*. Actuaciones como el Management by Walking About ayudan a pulsar las necesidades reales del personal y por ende de la organización.
El vital centrarse en los resultados y no en las actividades y esfuerzos
pues es muy fácil en el día a día “perdernos” en el flujo diario de los
procesos de trabajo y perder de vista el objetivo final de por qué estamos trabajando.
Construir sobre fortalezas
(3)
El Ejecutivo Eficaz (II) |
Bajo la premisa de que “la excelencia humana únicamente puede lograrse
en un área, o en unas cuantas como mucho”, el líder debe intentar potencial y
desarrollar sus puntos fuertes en vez de “derrochar” un exceso de energías en
“limar” nuestras debilidades (aunque siempre se deben tener en cuenta). El
desarrollo de nuestras fortalezas supone el medio mejor para obtener resultados.
Los líderes
no construyen sobre debilidades sino que consideran sus puntos fuertes así como
de los sus colaboradores y las ventajas que puede ofrecer cada situación. Las
debilidades sólo deben ser consideradas cuando su impacto se refleje en los
resultados a conseguir.
La nueva estrategia y el nuevo liderazgo en las empresas debe crearse en torno a las fortalezas de las personas con
el objetivo de ampliarlas y aprovecharlas para competir en el mercado.
Poner primero lo primero (4)
Aunque parece básico en muchas ocasiones olvidamos priorizar nuestro
trabajo. Debemos concentrarnos en aquellas tareas que son estratégicas para el presente y el futuro del desarrollo de nuestra empresa, enfocarnos en su desarrollo (y el nuestro) y abandonar aquellas
acciones que han dejado de ser productivas*.
Observación*. En sus Cinco Claves Drucker define como punto relevante determinar aquello que claramente debemos abandonar o no involucrarnos.
Observación*. En sus Cinco Claves Drucker define como punto relevante determinar aquello que claramente debemos abandonar o no involucrarnos.
Los buenos ejecutivos concentran su atención en las pocas actividades
donde se producen los resultados más importantes obligándose a establecer
prioridades (la otra opción es conseguir
que no se haga nada) y delimitando qué hacer y su orden de ejecución.
Se debe recordar que la resolución de problemas en una tarea de fin
desconocido y que nos puede llevar a un bucle sin final y con ausencia de
resultados. Se debe cambiar el enfoque hacia las oportunidades de modo que se
generen nuevas opciones.
Tomar decisiones efectivas
(5)
La adopción de las decisiones efectivas* se basa en un proceso que
comienza por la recopilación de opiniones y datos que son contrastadas en
relación a la línea estratégica de la organización
y que conlleva el “descarte” de las opciones que carecen de utilidad y
el desarrollo de aquellas que se encuentran en línea con el planteamiento
general de la organización.
Pormenorizadamente los ejecutivos eficaces buscan la opinión disidente,
adoptan decisiones recurribles, no toman decisiones basadas en lo que es
aceptable y basan sus actuaciones en hechos.
Nota*. Peter Drucker defiende
que existen personas que de forma natural son muy eficaces, sin embargo la
eficacia es una habilidad que puede ser aprendida mediante la iniciativa y
motivación.
La gestión y el liderazgo eficaz conlleva asumir la responsabilidad de
las decisiones adoptadas, así como sus riesgos. Dicha responsabilidad no puede compartirse ni
delegarse. Su autoridad emana de su credibilidad y de la confianza de la organización en sus líderes
los cuales siempre consideran las necesidades y oportunidades de la empresa por
encima de sus propios anhelos.
“Hasta
que podamos administrar el tiempo, no podemos gestionar nada más.” Peter F. Drucker,
experto austriaco en gestión empresarial.
Autor. José Daniel Blanco
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